La Bolsa.

A través del plástico veo sus ojos abiertos, llenos de lagrimones y pánico, un pánico que le marca el rostro con muecas ridículas, el sudor le baña el cuerpo, su respiración no es tal, mas bien crujir de aire que se le atraganta en los pulmones convulsionados. Comienza a toser, con una tos ronca, una secos golpes primero Y después, como si el pecho le fuese una reventar, los brazos hacia atrás, descoyuntados, las manos amoratadas, las venas hinchadas se le oscurecen ligeramente, él sigue sin hablar, sólo gime, se atraganta ... El jadeo es agónico Espantoso,, algo parece susurrar, náuseas una interminable preceden al silencio que se hace eterno. En un momento, alguien en la habitación se mueve y enciende una luz, el reloj de la pared marca las 14:30.

-- Bueno este video ya está, el cabrón no dio para más.

De un Tirón le arrancan la bolsa de la cabeza, que cae hacia delante como un trapo.
--Vamos a comer, se hace tarde.